Seguramente no soy la única a la que le pasa. Compro un manojo de apio para una receta que solo usa un par de ramitas, y me quedó con un restante de apio bastante grande. Cuando eso sucede, no dudo en preparar una ensalada de pollo con apio, manzana y nueces, puesto que personalmente disfruto del apio crudo. Y otras veces, preparo esta receta de pollo al apio, una receta que únicamente tiene dos ingredientes principales, por lo que además de fácil es muy económica.
Cuando está recién hecho, el sabor de nuestro pollo al apio no es muy fuerte, pero si lo hacemos de un día para otro encontraremos que el sabor es muy intenso, así que quienes gustan del apio estarán encantados con ello. Para lograr que la experiencia de sabor sea aún mejor, les recomiendo que dejen que el pollo se cocine hasta el punto en que se desprenda fácilmente y sin esfuerzo del hueso.
- 1 cucharada de mantequilla
- 6 piezas de pollo sin piel
- 6 ramas de apio
- 1 taza de caldo de pollo
- Sal
- Pimienta
- Sazona las piezas de pollo con sal y pimienta.
- Corta el apio en cubos pequeños.
- Derrite la mantequilla en una cacerola, cuando comience a tomar color agrega las piezas de pollo para que sellen, asegurándote que tomen un ligero tono dorado.
- A continuación, agrega el apio y saltea durante un par de minutos, para luego agregar el caldo de pollo.
- Tapa la cacerola y baja el fuego al mínimo, permite la cocción hasta que el pollo esté bien cocido y tierno, alrededor de 30 minutos y hasta que el caldo se haya reducido.
Al ser el apio el ingrediente estrella de esta receta no hace falta más que acompañarlo con un sencillo arroz blanco. Si tienen a la mano un poco de vino blanco, pueden usarlo en lugar del caldo de pollo, verán que queda aún mejor.
Información Bitacoras.com
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