La receta del día de hoy tiene su historia, y es que fue parte del menú que serví la primera Navidad que me tocó organizar. En aquella época, recién cambiada nuestra residencia, teníamos en casa una sencilla parrilla de dos hornillas por lo que la cena requería no ser muy complicada y no necesitar horno. Entre mirar aquí y buscar allá, decidí preparar este pollo en crema de pimientos, y el resultado fue mucho mejor de lo que esperaba.
Hoy que lo analizo, me doy cuenta que el sabor y textura están garantizados por dos ingredientes que siempre le dan un giro a cualquier platillo: el queso crema y la leche evaporada, ingredientes que a la fecha sigo comprando en las marcas Philadelphia y Carnation Clavel, pues la calidad de éstos no es superada por las otras marcas que hay disponibles.
Desde aquel entonces, 6 años ya, esta receta se ha vuelto parte de mis favoritas para ocasiones especiales, ya que la experiencia al probarlo es extraordinaria. Para acompañarlo no hay nada mejor que una pieza de pan salado, ya sean teleras o bolillos de la panadería mexicana, o un baguette estilo francés.
- 4 pechugas de pollo deshuesadas, sin piel y partidas a la mitad
- 2 pimientos rojos
- 2 pimientos amarillos
- 2 barras de 190 gramos de queso crema
- 2 latas de leche evaporada
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Calienta una sartén con un poco de aceite de oliva, y dora en este las mitades de pechuga de pollo previamente salpimentadas. Cuando estén doradas por ambos lados, agrega al sartén ½ taza de agua, tapa, baja el fuego y deja cocer hasta que el pollo esté tierno.
- Corta los pimientos en tiras pequeñas y sofríelos en una cacerola con una cucharada de aceite. Cuando estén tiernos pasa la mitad de los pimientos a la licuadora con el queso crema y la leche evaporada y procesa hasta obtener una salsa de textura suave. Dependiendo del tamaño de tu licuadora puede que necesites hacerlo en partes.
- Vacía la crema de pimientos sobre los pimientos salteados que quedaron en la cacerola, sazona con sal, y a fuego bajo permite que hierva por dos minutos.
- Para servir, rebana la pechuga y báñala con la crema de pimientos, decora con un poco de pimientos crudos cortados finamente.
Como verán en las fotografías, la última vez que lo preparé este pollo en crema de pimientos, lo he acompañado con esta ensalada de brócoli con almendras tostadas y aceitunas, pero lo he servido también con una ensalada básica a base de lechuga, jitomate y aguacate. Ambas nos ayudan a limpiar el paladar para poder seguir disfrutando del plato principal.
Espero que se animen a probarla, para mí, esta receta es una muestra de que no necesitamos un horno en casa para hacer un verdadero plato gourmet.
¡Buen provecho! y ¡Feliz Navidad!
primero que todo quiero agradecerte por compartir te mando un beso y un abrazo.
Gracias a tí, Luz, por leerme y por el comentario. ¡Feliz Navidad!
Soco muchas gracias por tus recetas, te deseo una feliz navidad en compañía de toda tu familia, tus receteas están sencillas y muy ricas
Paty,
muchísimas gracias. Feliz Navidad y un gran 2015 para tí y los tuyos. Un abrazo!