No hay hogar mexicano en donde no se cocinen buenas albóndigas, un plato sencillo qué siempre es bien apreciado por chicos y grandes. Entre las más tradicionales están las albóndigas en salsa de chile chipotle y el caldo de albóndigas con verduras. Pero siendo un platillo tan versátil, también nos encantan las albóndigas teriyaki inspiradas en la cocina oriental y las irresistibles albóndigas con espagueti. A todas ellas, se une una receta que hoy es de mis favoritas: unas albóndigas de pollo en salsa de piña.
Esta salsa barbecue de piña garantiza sorprender a nuestro paladar con un toque dulce, ligeramente ácido – agridulce -, pero a la vez un sabor profundo gracias a la adición de jengibre fresco y chile seco en hojuelas.
- 750 gr. de carne molida de pollo
- ½ piña, en cubos
- 1 huevo
- Sal y pimienta al gusto
- 4 cucharadas de salsa cátsup
- 1 cucharada de jengibre fresco, rallado
- 1 taza de agua o caldo de pollo
- 2 ajos finamente picados
- ½ cucharadita de chile rojo seco, en hojuelas
- 2 cucharadas de miel
- sal y pimienta negra al gusto
- Comenzamos preparando las albóndigas. En un tazón mediano mezclamos el pollo molido, el huevo y sazonamos con sal y pimienta. Damos forma a las albóndigas con las manos, usando entre 2 y 3 cucharadas de la mezcla para cada albóndiga. Reservamos.
- En una cacerola a fuego bajo añadimos la salsa cátsup, el jengibre fresco, la taza de agua o caldo, 2 ajos finamente picados, el chile seco, la miel y una pizca de sal y pimienta. Mezclamos hasta incorporar.
- Añadimos las albóndigas de pollo y la piña en cubos. Tapamos la cacerola y permitimos la cocción, moviendo cada 5 minutos, hasta que las albóndigas estén cocidas y la salsa haya reducido, aproximadamente 20 minutos.
Pero sin duda, lo que más me gusta de esta salsa BBQ es que no lleva azúcar ni tiene ingredientes artificiales como las que encontramos en los supermercados, por lo que es perfecta para quienes llevan la dieta paleo. Además, podemos fácilmente resaltar el sabor que más nos guste, ya sea el agridulce o el picante.
Al no ser un plato muy caldoso, estas albóndigas de pollo en salsa de piña son perfectas para llevar en la lonchera, tanto para el colegio como para el trabajo. Podemos acompañarla con una porción de arroz blanco, o mejor aún, una ensalada fresca de hojas verdes.
¡Buen provecho!
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